Debo
decir que puedo soportar muchos sentimientos diferentes a la vez. Puedo ser totalmente feliz y estar bastante mal al
mismo tiempo. Me consumen las dudas sobre la vida y la indiferencia por la
muerte. Esta combinación es muy posible si
tu espíritu es sólido, si eres fuerte. Me refiero a alguien que quiera
luchar hasta el fin más amargo y sea tan cínico como el Rey de Siam.