domingo, 13 de septiembre de 2009

de los Pensamientos cagones: maternidad

Volverme vieja,
ahora digamos, ese ahora se me vuelve anterior, se transforma en pasado, ahora es ayer. Me vuelvo vieja porque ayer era un poco mas joven... un poco más nueva, un poco más feto, un poco más madre...
Volverme vieja,
no puedo esperar a decir después, porque mañana no seré más antigua... que ayer.
Porque mañana me parece más fresco, y no puedo esperar a vivirlo. Cierto. No puedo...porque se me escurre como el presente ya pasado.. como hoy ya ayer..
Me vuelvo vieja cada vez que lo repito, más vieja, más vieja, más sabida, más mirable, más contenida, en fin, más Adulta.
Y no, eso no lo hacen los años.. no lo hace el hoy ayer y mañana de los días, no lo hace el calendario ni el reloj ni las lunas. Es mi advertir y mi querer volverme vieja porque el descontrol empezó a asustarme y he sido cobarde, incluso mañana... sí, me vuelvo vieja yo misma y - qué tristeza - es peor el miedo a la ignorancia que a lo invariable...
Gallina.
Me vuelvo madre, porque no me afirmo sino en otro y me normalizo en ello. Ahora soy. Me sigo volviendo ayer, la terrible originalidad madura de la juventud que está pronta a nacer...
a volverse inexorablemente vieja.
CAGAMOS POR SER LAS VIEJAS CAGANTES DE ESTAS VIEJAS CAGANTES.. VIEJAS CAGANTES..

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